Fue el partido perfecto o se puede esperar más? -Salió muy bien, pero creo que se puede y se tiene que esperar más. Lo bueno es que después de estos dos partidos, uno se da cuenta de que los jugadores se convencieron del estilo y que la idea les gustó. Para llegar a un nivel como el que le sirvió a España para ser campeón del mundo, necesitás tiempo de trabajo. Y eso, como se dice, no sobra.
-¿Esos seis días previos a España igual fueron poco o te sirvieron?
-Sirvieron mucho. Sobre todo en la convivencia del grupo. Mi verdad es ésta: el trato con los jugadores así, que estén contentos, que uno los escuche, que tengan ganas de venir porque es la Selección y porque se van a juntar con un grupo que está unido, con gente con la que van a disfrutar y a divertirse con la responsabilidad que hay que tener, porque esto no es joda, obvio. En el armado de un grupo uno tiene que saber que a la hora de mostrar los dientes, se muestran. Y los jugadores lo entienden, como pasó en esta concentración donde hubo una charla fuerte para que sepan cuándo se puede o cuándo no. Cuando te equivocás, viene la parte dura. Pero si no te equivocás, ¿para qué te voy a retar? Los concentré tres días, algo que creo que nunca se hizo para un amistoso, pero también los visitaron los familiares... Esa es la idea de manejo.
-¿Por qué los jugadores te apoyan, qué vieron en vos?
-Creo que es por el respeto que tenemos por ellos. Soy el técnico y sé que los jugadores son los más importantes. Y ellos lo notan... Los jugadores valoran a un técnico de bajo perfil. Se dan cuenta cómo es uno, cómo se maneja... Estoy para conducir a un grupo de jugadores, no para sentirme más que ellos.
-El jugador te estudia cuando sos nuevo. ¿Cómo se logra convencerlo?
-Siempre pasó eso. Cuando llega un técnico nuevo va rindiendo examen. Y más allá de mis características, al jugador lo terminás convenciendo cuando lo que practicás se da en la cancha. Cuando al jugador le das a entender de qué modo se puede ganar un partido, se va convenciendo y va viendo que vos también estudiás rivales, que trabajás para eso...
-Y vos justamente ahora estás con chicos que día a día trabajan con los mejores técnicos del mundo...
-Y sí, siempre hay que demostrar...
Y es difícil, eh. Pero ojo que yo aprendo, estudio, escucho y los veo trabajar a los mejores técnicos del mundo y voy incorporando cosas. Cuando sos el técnico de la Selección Argentina, tenés que demostrar un poquito más...-Al grupo le quedó algo que ensayaste y que fue clave contra España...
-Sí, practicamos lo que después salió en el partido: se entrenó mucho pensando en cómo jugaba España, en el hecho de que si Carlitos Tevez, Higuaín o Messi les ganaban las espaldas a los volantes y lográbamos llevarles la pelota a ellos a ese sector como para que después jugaran a dos toques y picaran en diagonal, tendríamos muchas chances de ganar.
-¿Entonces vos cambiarías de acuerdo al rival?
-No, mi estilo se mantiene siempre: yo quiero el respeto por la pelota, jugarla con paciencia. Eso es lo que me gusta. Pero seguramente voy a analizar los puntos débiles del rival y hacer que mi equipo también pueda jugar como para saber aprovecharlos. Para este último partido, además de trabajar mucho la posesión con esos ejercicios que comenté, también practicamos pelotazo. Ojo, no pelotazo para arriba a cualquier lado... España, cuando vos tocás para atrás, te presiona mucho, pero la defensa de cuatro sale en línea. Entonces nosotros ensayamos con Demichelis y Gaby Milito que cuando la pelota iba para atrás, ellos supieran que los delanteros picaban, no importaba si quedaban en offside, como para poder buscarlos en la larga...
-El sistema de juego, llamar a Zanetti y Cambiasso, la preocupación por el rival... ¿Buscaste diferenciarte del ciclo anterior?
-No, yo no trabajo pensando en diferenciarme con nadie ni en comparaciones que les toque hacer a otros. Mi función es ocuparme de la Selección en estos partidos y tratar de hacerlo de la mejor manera. Y quiero dejar clara una cosa: acá los que ejecutan lo que uno propone son los jugadores y, por lo tanto, los partidos los ganan ellos, no el entrenador...
-Si hubiera que definir el estilo Batista, sería...
-Me gusta que todos jueguen: que el arquero juegue con los pies, que los centrales jueguen, que los marcadores de punta jueguen y que los volantes jueguen... Quiero que la pelota les llegue bien a los delanteros, no que les llegue sucia. Se arriesga, sí, pero con tranquilidad y paciencia se puede jugar así sin ningún problema. Quiero que mi equipo desborde al rival por las puntas y llegue con cuatro al área, pero también que luego retrocedamos todos juntitos si perdemos la pelota, no que llegue uno y el otro quede atrás. El desorden no me gusta...
-Ahora se te viene Japón, ¿cómo proyectás ese partido en Tokio?
-Quizás sirva para rotar y darles más minutos a muchachos que no jugaron tanto. Habrá algunos nombres nuevos y quizás otros que ya estuvieron pero que no jugaron tanto lo van a hacer un poco más.
-¿Sufriste con Messi? -
Cuando vi la patada, la verdad es que me asusté. Me preocupa pensar que haya rivales que lo busquen con la intención de lastimarlo.
-¿Es Messi más diez como se dijo alguna vez? -
Leo es decisivo, pero no es el salvador del equipo. Yo lo quiero arrancando como un ocho adelantado y que después termine donde sea. Pero no me gusta que baje mucho.
-¿Vas a hablar con Tevez por esta idea que tiene de retirarse?
-No pude hablarlo todavía, pero sí, voy a hacerlo. El es un jugador muy importante. No digo que ahora en Inglaterra no esté bien, pero a mí me gusta el Tevez de Boca, ése que jugaba y tocaba.
-Se habla mucho de tu relación con Bilardo...
-Me enoja que quieran inventar... En el predio está todo bien, está todo en paz. Hablamos con él y lo consultamos de todo. La relación es muy buena, yo soy un tipo abierto y no tengo que pelearme con nadie.
-Cuándo se habla, todavía, de otros candidatos para dirigir a la Selección, ¿qué te pasa por la cabeza?
Nada... Yo estoy respetando lo que me dijeron, que es que tengo que trabajar hasta después del partido de noviembre contra Brasil. Y si se habla de candidatos y mi nombre está entre ellos, me pone contento... A lo mejor les llevo una pequeña ventaja por estas dos victorias.
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